GRAN DUCADO DE LUXEMBURGO:
(Periodo Dinástico Independiente; 1890-1918)
Duque Alfonso (1895-1905)
10 Céntimos; 1901
Cuproníquel.
20,00 mm; 2,95 g.
Ceca: Bruselas, Bélgica
Cabeza descubierta de Adolfo a derecha.
KM #25; Probst #267-1
El Periodo Dinástico Independiente de Luxemburgo (1890-1918) marcó un hito en la historia del Gran Ducado, cuando la extinción de la línea masculina de la casa de Orange-Nassau lo separó definitivamente de los Países Bajos. La Ley Sálica impidió que la reina Guillermina heredara el trono, llevando a la ascensión de Adolfo de Nassau, quien estableció una dinastía propia y consolidó la identidad monárquica luxemburguesa. A pesar de su proclamada neutralidad, el país no escapó a los embates de la Primera Guerra Mundial, siendo ocupado por Alemania en 1914, un suceso que pondría a prueba su soberanía y su futuro en el escenario europeo.
GRAN DUCADO DE LUXEMBURGO:
(Periodo Dinástico Independiente; 1890-1918)
Duque Alfonso (1895-1905)
10 Céntimos; 1901
Cuproníquel.
20,00 mm; 2,95 g.
Ceca: Bruselas, Bélgica
Cabeza descubierta de Adolfo a derecha.
KM #25; Probst #267-1
El Periodo Dinástico Independiente de Luxemburgo (1890-1918) marcó un hito en la historia del Gran Ducado, cuando la extinción de la línea masculina de la casa de Orange-Nassau lo separó definitivamente de los Países Bajos. La Ley Sálica impidió que la reina Guillermina heredara el trono, llevando a la ascensión de Adolfo de Nassau, quien estableció una dinastía propia y consolidó la identidad monárquica luxemburguesa. A pesar de su proclamada neutralidad, el país no escapó a los embates de la Primera Guerra Mundial, siendo ocupado por Alemania en 1914, un suceso que pondría a prueba su soberanía y su futuro en el escenario europeo.