BULGARIA (Reino; 1908-1946):
Fernando I (1887-1918)
Emisiones durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918)
20 Stotinki, 1917. Zinc
21,20 mm; 4,05 g - KM #26.a
Muy Bueno [VF+]
En el anverso, el escudo de armas coronado del Reino de Bulgaria.
En septiembre de 1915, el reino de Bulgaria se alió con las potencias centrales y atacó Serbia, ingresando de este modo en la Primera Guerra Mundial. Una vez logrados los territorios anhelados, Bulgaria perdió su interés por la guerra y trató de mantener sus ganancias hasta la conferencia de paz. Sus discretos intentos de firmar una paz separada gracias a la mediación de los Estados Unidos, país con el que no se hallaba formalmente en guerra, fracasaron.
Finalmente, en el otoño de 1918, la desmoralización de las tropas por la situación cada vez peor del frente, la evacuación alemana de gran parte de sus unidades, las penurias en la retaguardia y una dura ofensiva de la Triple Entente hundieron el frente macedonio. El Gobierno búlgaro tuvo que apresurarse a solicitar el armisticio, incapaz de frenar el avance militar aliado, mientras se enfrentaba a un motín revolucionario de parte de las unidades, que pudo finalmente ser sofocado.
BULGARIA (Reino; 1908-1946):
Fernando I (1887-1918)
Emisiones durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918)
20 Stotinki, 1917. Zinc
21,20 mm; 4,05 g - KM #26.a
Muy Bueno [VF+]
En el anverso, el escudo de armas coronado del Reino de Bulgaria.
En septiembre de 1915, el reino de Bulgaria se alió con las potencias centrales y atacó Serbia, ingresando de este modo en la Primera Guerra Mundial. Una vez logrados los territorios anhelados, Bulgaria perdió su interés por la guerra y trató de mantener sus ganancias hasta la conferencia de paz. Sus discretos intentos de firmar una paz separada gracias a la mediación de los Estados Unidos, país con el que no se hallaba formalmente en guerra, fracasaron.
Finalmente, en el otoño de 1918, la desmoralización de las tropas por la situación cada vez peor del frente, la evacuación alemana de gran parte de sus unidades, las penurias en la retaguardia y una dura ofensiva de la Triple Entente hundieron el frente macedonio. El Gobierno búlgaro tuvo que apresurarse a solicitar el armisticio, incapaz de frenar el avance militar aliado, mientras se enfrentaba a un motín revolucionario de parte de las unidades, que pudo finalmente ser sofocado.